Un terrible suceso ha ocurrido en Rusia. Un hombre de 46 años ha confesado haber matado a su hija a través de unos sicarios. Este hecho se produjo porque su hija, de religión islámica igual que su padre, se puso una minifalda, algo que no toleró el padre, por aquello de que pudieran mirar mal a su hija. Simplemente el hecho de ponerse una minifalda fue lo que al padre le enfadó tanto, que mando llamar a tres sicarios para que mataran a su hija de tres disparos, dejando su cuerpo sin vida en el bosque.
Es ciertamente lamentable que existan personas tan despreciables que puedan quitarle la vida a una persona y mucho más a su propia hija. Nada justifica que alguien mate a otra persona, pero mucho menos una tontería como ponerse una u otra prenda de vestir. Es ciertamente lamentable y esperemos que la justicia rusa sea dura con este personaje y con los sicarios, que fueron los autores materiales del asesinato a sangre fría de la pobre china, universitaria, que por vestirse con la minifalda, perdió la vida.
Este tipo de casos es realmente lamentable que sigan sucediendo en personas con la mente muy cerrada y con una religión que les hace ver cosas que no son. Es una mezcla de mentalidad de a persona, ayudada por la religión y la sociedad. Todo contribuye para que este tipo de casos se sigan sucediendo una y otra vez.