Para viajar o realizar vuelos con bebés debemos tomar muchas medidas de seguridad, porque los bebés son muy sensibles. En primer lugar es fundamental hacer un botiquín especial para el pequeño, donde tengamos a mano lo que es posible que usaremos, para que en ningún caso estemos desprevenidos ante ninguna situación que se pueda dar. El clásico suero para bebé, alguna que otra crema solar, repelente especial para los mosquitos y otras cosas que son indispensables para que nuestro bebé esté controlado y protegido en todo momento, que es algo fundamental, para que los padres puedan viajar muy tranquilos con su bebé bien cuidado.

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A pesar de que un bebé es muy pequeño, debemos consultar las vacunas que le harían falta para estar seguro en el destino al que nos dirigimos. Las vacunas no es lo mejor para un bebé, pero no queda otra para poder evitar que se enferme gravemente de la malaria, dengue, entre otras enfermedades. Con las vacunas ya podemos viajar mucho más tranquilos, aunque no del todo, ya que a la vuelta a casa, hay que permanecer atentos.

Si nuestro bebé presenta síntomas extraños después de volver a casa, es un síntoma de que algo no anda bien y siempre será recomendable llevarlo al pediatra. Los bebés pueden viajar sin problema alguno y muchos no enferman, siempre y cuando tengamos cuidado también con las comidas, con el agua y demás cosas que puedan ser aconsejables en mayores, hay que intensificar el control en los más pequeños, ya que los bebés son los que más sensibles son.

Vía|Beberymás

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